Villa Banic es realmente impresionante, tanto por dentro como por fuera. Se encuentra en una de las regiones más bellas de Croacia, Istria Central, y está rodeada de colinas, bosques y naturaleza virgen.
Imagínese lo que se siente al salir a la calle y vislumbrar una encantadora ciudad medieval en lo alto de una colina. La zona exterior ofrece una acogedora zona de piscina con tumbonas y un comedor cubierto con una preciosa cocina de verano y barbacoa de carbón. Desde la sombreada terraza se accede directamente a la planta baja diáfana. En la planta baja encontrará un romántico salón con chimenea, una preciosa zona de comedor y una cocina totalmente equipada que combina detalles modernos con rústicos. La villa dispone de cuatro dormitorios, todos ellos equipados con aire acondicionado y cuartos de baño en-suite. Tres dormitorios tienen cama de matrimonio y un dormitorio tiene dos camas individuales. ¡Pero eso no es todo! En la planta inferior encontrará una zona de bienestar con sauna y jacuzzi para que sus vacaciones sean aún más perfectas.
Pase sus vacaciones en esta magnífica propiedad y descubra los encantadores alrededores.La villa está situada cerca de la antigua ciudad de Buzet, en el norte de Istria, cerca de la frontera con Eslovenia. Su centro medieval está situado en una colina sobre el fértil valle del río más largo de Istria, el Mirna. En la actualidad, Buzet es conocida como la ciudad de la trufa, ya que los bosques que bordean el Mirna son especialmente ricos en estos maravillosos tubérculos.
estos maravillosos tubérculos. Según algunos, las trufas blancas de Istria son comparables a las trufas blancas de la famosa región trufera de Alba, en Italia. En honor a ello se celebra cada año en septiembre y octubre el famoso festival de la trufa. La famosa ciudad medieval de Motovun se encuentra a pocos kilómetros de la villa. La ciudad medieval de Motovun, de impresionante belleza y situada en lo alto de una colina, está reconocida como ciudad patrimonio y desprende auténtico encanto e historia de Istria, aderezado con espectaculares vistas a las colinas cubiertas de viñedos, aldeas y granjas, así como al mágico valle de Mirna. Aquí se celebran fiestas locales tradicionales y el renombrado festival internacional de cine, que animan este pequeño y tranquilo lugar.