Casa rural de construcción centenaria, restaurada y ampliada respetando al máximo su estilo, e integrada en la naturaleza que le rodea, con todas las comodidades actuales para disfrutar de unas apacibles y relajadas vacaciones en un entorno rural.
Al entrar en la casa nos encontramos con un amplio salón con televisión y chimenea que comparte estancia con el comedor y la cocina con lavavajillas, microondas, tostador, etc. Esta zona de salón-cocina tiene un altillo con una cama doble. La casa también dispone de un dormitorio con cama doble y un baño con ducha. Toda la vivienda está equipada con calefacción central.
En el exterior, dispone de una agradable terraza techada con un comedor exterior. Por la parte trasera de la casa se encuentra otra terraza con la barbacoa y cerca de la entrada esta la piscina privada y las tumbonas.
Gracias a su espléndida situación, desde la casa y sus terrazas se observan preciosas vistas panorámicas del Atlántico y la vertiente norte de la isla, con zonas de cultivo y restos de bosques de castaños, laurisilva, robles, etc.., así como aves y otros tipos de fauna y flora característica. Rodeada de caminos reales para realizar senderismo.